• La escuela fue víctima de constantes robos durante la pandemia.
• Toda esa inseguridad y otras razones que no explican las autoridades educativas, son motivo de esa decisión.
• Hay niños autistas y por ello, los padres quieren remediar la situación en pro de la seguridad de los pequeños.

Por: Oswaldo Ceballos

Xalapa, Ver. Ante el cierre de una escuela primaria en esta ciudad, los padres y madres de familia quieren ser escuchados y evitar que se dé esa acción que afectaría a decenas de estudiantes.

Se trata de la primaria federal Alfonso Arroyo Flores con clave 30DPR4809B ubicada en la calle Colima número 150 de la colonia J.J. Panes.

“Hemos tocado puertas con el Ayuntamiento, la Regiduría 12, la dirección de Medio Ambiente, la Policía Municipal y en la Secretaría de Educación de Veracruz (SEV) y ésta última dando nulas respuestas para que se permita que los niños sigan estudiando en este plantel educativo, eso desanima a los chicos y existe la posibilidad de deserción escolar gracias al desdén de la SEV”, exponen a este reportero.

Dentro de un documento legal al cual se tuvo acceso, dirigido al secretario de Educación estatal, Zenyazen Escobar García, los padres de familia han informado de “una oleada delictiva en contra de la escuela” solicitando colaboración interinstitucional para salvaguardar la integridad de los estudiantes y que el alumnado sea restituido de nuevo al plantel en mención ya que el desplazamiento a un lugar más retirado puede generar un peligro para ellos.

A su vez, explican que conforme ha avanzado el tiempo, el cuerpo docente ha decrecido en número quedando hasta ahora un solo profesor que hace múltiples funciones desde la dirección hasta la limpieza del plantel por lo que no quieren cambio de maestro.

Y es que esa escuela no ha contado por varios años con personal de aseo ni de Educación Física, exigiendo los padres el conocer cuál ha sido la razón de esto.

Cabe señalar que la Policía Municipal ha colaborado en la medida de sus posibilidades incluso al “chapeo” en la escuela además de realizar vigilancia debido a los constantes robos que ha sido objeto la institución.

“Al supervisor se le hizo muy fácil cerrar la escuela para que los niños estén en una donde les prestaron un salón y la verdad pues ya no hay delincuencia desde que los policías estuvieron haciendo rondines”, comentan las madres y padres de familia.

“De manera enfática nos oponemos al cierre, pedimos ayuda al gobernador Cuitláhuac García Jiménez a quien ya le enviamos el documento y consta el acuse. Tenemos que resaltar que la plantilla escolar tiene niños en condición de autismo y deseamos que se visibilice la dura realidad que tenemos”, puntualizan.