Por: Oswaldo Ceballos Fornaguera

Se enfocaron en despedazar a un equipo que tenía al mejor jugador del mundo y lo consiguieron, Barcelona se cae a pedazos y no tiene un futuro promisorio inmediato ni en Liga ni mucho en Champions League a la que seguramente no llegará para la siguiente temporada.

Sí, ni puestos de Champions tendrá este equipo para el 2022.

Hay mucho romanticismo en la llegada de Xavi al banquillo, como siempre, apelan por el que un técnico conozca la casa y que haya surgido de ahí, pero ojo, no siempre se tendrá éxito como lo que pasó con Guardiola.

En aquella época, Guardiola logró tanto en parte por el equipo que tenía, esa es la realidad sin restarle mérito al esfuerzo que el técnico catalán hizo en cada temporada.

Hoy, Xavi no tiene ni una cuarta parte de lo que aquel equipo era, el exjugador del Barcelona viene solo con la experiencia como DT en un equipo de Catar. A Xavi lo eligen porque el barcelonismo en general lo pedía y por sus méritos como futbolista no como técnico.

Y eso es un grave error que muchas veces pasa, que ojalá los culés no terminen pagando pronto y el experimento Xavi termine en fracaso principalmente porque la tolerancia ahí es muy poca y no va ni la mitad de temporada.

Lesiones y malas decisiones, eso es lo que aplasta a este Barcelona, además del uniforme más feo de toda su historia, ad oc a su triste presente.