Un nido de estos insectos se había formado junto a la colmena que la víctima cuidaba
Daniel García Doval, de 54 años, murió en Santiago de Compostela, Galicia, a consecuencia de la picadura de una avispa “Vespa Mandarina”, también conocida como avispa asiática, tras descubrir que había un nido de estos ejemplares cerca de las colmenas que él cuidaba y que se situaron muy cerca de su casa.
El insecto aguijoneó la ceja de la víctima que, a los pocos minutos se desvaneció.
Los detalles del incidente se conocieron porque García Doval estaba acompañado de un vecino que también cría abejas, que fue quien llamó a emergencias.
Fuente: Milenio