Max durmió su última noche en el cuarto de su dueña, “estaba muy cansado”
Max, un perro de raza husky, y su dueña vendían cupcakes afuera de una iglesia de Hermosillo, Sonora, para costear la biopsia y medicamentos que necesitaba (el can) debido a que, tenía ganglios en la mayor parte de su cuerpo.
Pese a los esfuerzos de Yoseline Macías, su dueña, por darle el tratamiento necesario, Max falleció este domingo.
La noche del sábado, Max “se veía muy cansado y su respiración era muy agitada. Me puse en contacto con la doctora, le indicó reposo, porque todo lo demás se estaba tratando. Max cenó bien, tomó agua y estaba descansando”, detalló Yoseline en su cuenta de Facebook.
Sin embargo, a las 05:00 horas de este domingo, el perro entró al cuarto de la joven y se quedó dormido, pero en la mañana ya no despertó.
“Esta mañana, a las 5 am, Max entró a mi cuarto, cosa que el nunca hacía (porque) el dormía en la sala. Se quedaba viéndome, nunca voy a olvidar eso. Después durmió mucho, a un lado de mi cama y mío. Yo volví a dormirme y cuando desperté, él ya había fallecido”, contó.
A Max se le realizará una necropsia para determinar la causa de su su fallecimiento y posteriormente será llevado a un crematorio de mascotas.
Fuente: Grupo Fórmula