Empleados de la empresa Autlán, propiedad de Grupo Ferrominero de José Larrea, dieron a conocer que desde hace dos semanas únicamente se les paga 50 por ciento de sus sueldos a los cien trabajadores sindicalizados de la mina Naopa del municipio de Lolotla
Al momento bloquean pobladores de comunidades afectadas por contaminación que atribuyen a la extracción de manganeso. En respuesta a la movilización, Autlán determinó iniciar un paro técnico de forma indefinida.
Los trabajadores afectados exigieron a representantes de la empresa y a integrantes del Movimiento Ambientalista de la Sierra Hidalguense (MASH) que lleguen a un acuerdo, para que el enclave minero pueda reanudar sus labores.
El MASH aglutina a pobladores de más de 12 localidades de los municipios de Molango, Lolotla y Tepehuacán de Guerrero que desde el pasado 7 de septiembre, junto con transportistas, impiden el paso a la mina en protesta por la contaminación del río Claro y debido a afectaciones en sus casas que atribuyeron a explosiones de dinamita realizadas en Naopa.
Al momento prosiguen las negociaciones entre directivos de Autlán encabezados por Roberto Rivera Larrea, director de Vinculación y Desarrollo Institucional de la empresa, una comisión del MASH integrada por los activistas Griselda Bautista y Eduardo Medecigo Rubio, así como representantes de las localidades con la intermediación de Abraham Mendoza Zenteno, delegado estatal de Programas de Bienestar del gobierno federal.
De acuerdo con asistentes a las pláticas, algunos delegados de comunidades están reticentes a retirar el bloqueo a los dos accesos de Naopa –de donde se extrae la mayor parte de manganeso que Autlán procesa y vende—, pero ya se logró que acepten abrir una de las entradas parcialmente, para que entren a la mina personal operativo y vehículos que llevan manganeso a centros de venta ubicados en otras entidades.
Otros acuerdos son solicitar que una empresa aseguradora haga un peritaje que determine si los daños estructurales a viviendas en las localidades Chinconcuac y Tolago, del municipio de Lolotla, se deben a explosiones de dinamita o por estar mal construidas. Además, Autlán aceptó ampliar la oferta de trabajo para los vecinos de 13 comunidades que integran el MASH, y no sólo a pobladores de comunidades en las cuales se hallan sus minas.
Fuente: Jornada