Más de 450 mil clientes reclaman una reparación a la automotriz alemana Volkswagen por fraude de emisiones, en el denominado ‘dieselgate’
El primer gran juicio de consumidores contra Volkswagen en Alemania empezó hoy, con cientos de miles de clientes que reclaman una reparación por sus vehículos diésel trucados, cuatro años después del estallido del ‘dieselgate’.
La primera audiencia de este juicio, que se escalonará a lo largo de varios años, empezó a las 08H00 GMT en el tribunal regional de Brunswick, a unos 30 km de la sede histórica de Volkswagen en Wolfsburgo (Baja Sajonia).
Más de 450 mil personas se inscribieron en esta acción colectiva, la primera de este tipo en Alemania, según un procedimiento adoptado en el contexto del ‘dieselgate’.
La asociación de consumidores VZBV, que hace las veces de demandante único, acusa al grupo automovilístico de haber perjudicado deliberadamente a sus clientes al instalar un dispositivo que hace que el vehículo parezca menos contaminante de lo que es en realidad.
Me gustaría que Volkswagen devolviera el precio de compra”, dijo Andreas Sarcletti, un cliente de Hanóver.
Pero me temo que el juicio durará mucho tiempo”, añadió.
Este juicio es, por el momento, el más importante en Alemania por el escándalo de Volkswagen, que intenta pasar página apostando por la energía eléctrica.
Los jueces deberán abordar unos 50 puntos, pero la cuestión principal será determinar si Volkswagen “provocó un prejuicio” y “actuó de manera contraria a la ética”.
Confiamos en nuestras posibilidades de éxito, porque Volkswagen cometió fraude”, dijo antes de la audiencia Ralph Sauer, el abogado de la VZBV.
Por su parte el director de la VZBV, Klaus Müller, dice estar “convencido” de que la decisión del tribunal irá en este sentido. Pero Volkswagen mantiene que “no hay daños y que, por tanto, este requerimiento no tiene fundamento”.
61 MIL DEMANDAS
Aún hoy siguen utilizándose cientos de miles de vehículos”, insiste Martina de Lind van Wijngaarden, abogada de la empresa.
Aunque la sentencia sea desfavorable a Volkswagen, no implicará un reembolso directo, sino que cada consumidor registrado deberá reivindicar sus derechos de forma individual.
El examen de esta acción colectiva durará al menos hasta 2023, debido a la posibilidad de una apelación ante la Corte Federal, según Volkswagen. Después, los procedimientos individuales pueden tomar al menos un año más.
Para reducir la duración del proceso, la VZBV está “abierta” a un acuerdo amistoso, pero “en ese caso, Volkswagen deberá, a pesar de todo, pagar un monto significativo”, explicó Müller a la AFP.
El fabricante considera “poco imaginable” un acuerdo de ese tipo, debido a la heterogeneidad de las situaciones, como la compra de vehículos en el extranjero o después de la revelación del escándalo.
La segunda audiencia está prevista el 18 de noviembre.
En paralelo, en Alemania se presentaron 61 mil demandas individuales, de las que una parte llevaron a acuerdos extrajudiciales.