El académico de la Universidad Autónoma de Tamaulipas, Rosalino Amador Alonso, señaló que para el rescate de la educación en el país se tendría que crear un organismo descentralizado que se encargue de dirigir este sector y con ello evitar la intervención política en la misma.

“Con este espacio se podría garantizar la educación, no desde la perspectiva de los jóvenes que están en los espacios que buscan una gubernatura, algún puesto público, debe ser el maestro, aquél que hizo zurco y no el que con olor a lavanda quiere decirnos qué es la educación”, expuso.

Indicó que se requieren organismos creados a partir del sindicalismo que sean genuinos y atiendan los intereses del gremio. Mencionó que con el corporativismo de los años setentas y ochentas se perdió el objetivo de la educación en el país, por lo que de requiere una reconciliación nacional y no una amnistía en este rubro.

Señaló que el Estado es el encargado de proveer la educación y de establecer las políticas públicas y una rectoría que rija el rumbo. Sin embargo, ese sentido se perdió en el corporativismo de los años setentas y ochentas porque se cedió a grupos magisteriales, “hablo de estos grupos de la forma politizada basada en los intereses económicos, de tipo partidista y en el que se olvidó el tema educativo”.

Reconoció que en la actualidad se están pagando las “consecuencias” de hechos pasados, “tanto es así que con la Reforma se trata de recuperar el liderazgo llamado rectoría del Estado respecto a los contenidos”.

Refirió que la intención de reformar la educación habla de más contenidos técnicos y laborales que académicos. “Hay problemas de tipo laboral y la molestia se despierta más en el sureste del país respecto a esta reforma”, dijo.

Indicó que ante ello a corto y mediano plazo se debe hacer una revisión a las políticas educativas y al final establecerlas a favor de la educación.